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No creo que nos podamos permitir en Gijón tanta marcha atrás. Menos mal que es un vago, porque podría haber roto muchas más cosas de las que ha estropeado.

En ciudades como Gijon el aparcamiento para este tipo de bicis es difícil de gestionar, creo. Habría que proponer soluciones.

Me gusta.

Casi me ahogo!

Buena idea!

Me gusta aún más que se lo coja y lo deslice lentamente dentro del tanque de agua, un antigua acuario sin peces, en el fondo del cual se encuentra un cementerio de partidos de fútbol, vídeos mierda, y cuñaos opinando desde teléfonos muertos.

Así no hace ruido ella.

Y sí, #notalldrivers pero también #alwaysadriver.

Como es “normal” que si una chica va a su bola por la calle pero con una falda corta, pues que le digan algo.

Y son muchas cosas más. El coche potencia los comportamientos individualistas del “yo paso primero”, y de que “en el bien común que piense otro”. Contamina (sí, los eléctricos también).

Vemos en nuestras ciudades que según qué calles, se dedica a los coches más del 80% de ese espacio que nos pertenece a todos. No sólo eso: son los que convierten nuestras calles en peligrosas, y de nuevo, es “normal” que haya que vigilar a los niños y agarrarlos para que no los atropellen…

Pues la motonormatividad es parecido, pero con los coches.

Nos parece normal y lógico que se ocupe el espacio público de manera permanente con propiedad privada. La calzada al menos se comparte con el transporte público y vehículos utilitarios, pero las bandas de aparcamiento no, salvo descarga.

“Los hombres son más valientes” (a las respectivas selecciones de futebol de hispania me remito), y un largo etc que muchas compañeras llevan presentando fenomenal en muchos sitios.

(Hay definiciones mucho mejores por ahí, eh! Pero es jueves y hoy toca así). Bueno, seguimos. Estas normas hacen que nos parezca “lógico” un montón de cosas que no tienen ni pies ni cabeza, como que “las mujeres somos más emotivas” (recordemos que la ira no es en absoluto una emoción),

A ver si consigo explicarme. El
patriarcado es un conjunto de normas sociales interiorizadas en las que se formaliza una jerarquía de poder (u opresión) desde el Pater, el jefe, que es el que está arriba del todo, hasta las mujeres, que estamos bien abajo.

Eso te pasa por saber decir buenas tardes o que aproveche. Si sólo supieras decir gracias, como la gente normal, no te pasaría.

Puagh ^1000000

💚 Romero

Bueno. Tú dices eso, pero por otro lado el Oviedo ha subido a primera. No puede ser casualidad.

Es un sinsentido. Como bien dices, los peatones y las ciclistas tenemos que sufrir cotidianamente estas agresiones viales por “la ehpaña que madruga” como si nosotras no fuéramos la base de esos que “mendrugan”.