En Rosita y Amparo recogemos el guante de Pinilla (y de Murillo) y, en nuestra colección de ficción, Contar, publicaremos narrativa contemporánea de autoras y autores jóvenes, con un estilo comprometido e innovador, que cuenten (nunca que digan) las historias.

Madrid
«Nubosidad variable», de Carmen Martín Gaite
Aunque nos ha costado no optar por Almudena Grandes, Alana S. Portero, Belén Gopegui, Cela o Elvira Lindo.

Barcelona
«La plaça del Diamant», de Mercè Rodoreda.
Pero también podríamos haber seleccionado a autoras y autores como Carmen Laforet, Segarra, Cristina Morales, Carlos Zanón, Eduardo Mendoza, Marsé o Vila-Sanjuan.

València
«Noruega», de Rafa Lahuerta Yúfera, Premi Lletraferit de novel·la 2020 (Llibres de la Drassana)
Si no hubiéramos puesto Noruega habríamos elegido alguna novela de Manuel Vicent, Blasco Ibáñez, Chirbes o Ferran Torrent, la poesía de Vicent Andrés Estellés o las novelas gráficas de Paco Roca.

Su literatura fue reconocida con premios como el Café Gijón, el Nadal, el Anagrama de Ensayo, el Nacional de Literatura o el Príncipe de Asturias.
Hoy celebraremos su cumpleaños leyéndola porque, por fortuna, nos quedan sus libros.

y de ensayos entre los que destacan «Usos amorosos del dieciocho en España» o «El proceso de Macanaz: historia de un empapelamiento», también practicó el relato, la poesía y otros muchos géneros.

Por eso en Rosita y Amparo hemos creado la colección Volver con la que queremos recuperar textos que nos cuenten, que nos introduzcan en lo que somos en este fugitivo tiempo actual.

Pero si el futuro no existe más que en el plano hipotético de la proyección y el presente es efímero y fugaz, inasible, un simple umbral entre lo existente y lo que va existir, quizá lo único que seamos es pasado, prólogo.