El dinero es lo de menos. Y aquí no se flipa nadie, salvo que ya pasemos por todo y nos parezca normal esta puta feria de los notables.

Es que estoy seguro de que muchos fliparíais con la cantidad de filtros y precauciones que rodean la actividad profesional de un funcionario. Por eso es doblemente indignante (e inexplicable) que se tolere esto. ¿Son aristócratas old style, estos tipos? ¿Están por encima de las leyes?

Es que la idea se come a la trama. David Simon se estrelló igual que Roth cuando la adaptó a la tele, la idea pesa demasiado.

Se han cepillado por cierto al resto de sus compañeros. Millás, etc. Es una memoria literaria de alcance muy corto.

Y hay delitos mayores.